"La vida es dura, pero es mucho más dura cuando eres estúpido." John Wayne.
En “Matrix”, el protagonista debe elegir: ¿la pastilla roja o la
azul? Y la mayoría cuando vimos la película nos hicimos la misma pregunta:
¿Qué
es mejor: seguir engañados, inconscientes pero relativamente felices o tener
acceso a la verdadera realidad y perder la inocencia, y con ella, parte de la felicidad?
¿Qué me sucede ahora? Pues quizás que he leído demasiada
filosofía, y que soy hija de la postmodernidad: ya no creo en decisiones entre
el rojo y el azul. Y mucho menos en una única Verdad que lo explique todo. Así
que ahora me cuesta hacerme una pregunta que simplifica tanto la vida.
Tampoco he caído en el relativismo, ni pienso que cualquier idea
puede sostenerse con un simple argumento. Aunque lo que afirmo en el párrafo
anterior parezca contradecirlo. Pero no, aunque los demás no me entiendan, yo
sí que me entiendo (o eso creo) y eso es lo que realmente importa.